Estamos muy cerca de fin de año, época de hacer balances, pensar en lo que nos trajo y nos deja este 2022. Momento de comenzar a vibrar con buenos deseos e intenciones para que el año nuevo sea prospero y abundante en todos los sentidos.
Hoy les proponemos un poderosísimo y sencillo ritual para recibir el Año Nuevo.
En publicaciones anteriores hemos mencionado la importancia de realizar rituales para elevar las energías. Sucede que mientras estamos en el proceso del ritual, todos los pedidos y buenos deseos quedan fijados en nuestra mente, la concentración es tan grade que vamos dejando de lado los numerosos pensamientos que tenemos por minuto.
Al conectar con los pensamientos positivos, de amor, alegría y agradecimiento, activamos el lenguaje vibratorio con el Universo. Somos energía y vibración, si realizamos los rituales con conciencia, atendiendo a nuestras emociones y confiando en nosotros mismos y en ellos, vibraremos en sincronía universal.
Ritual
Necesitaremos: Una vela blanca, salvia, laurel y semillas.
Vela blanca: Las velas son elementos indispensables en casi todos los rituales, sus llamas funcionan como un portal espiritual de conexión con el Universo. El color blanco simboliza la paz, el amor, la gratitud y la luz.
El uso de plantas para sanar en diferentes formas (infusiones, cataplasmas, ungüentos, colonias) es parte de la medicina ancestral. Para estas culturas chamánicas, las plantas eran consideradas iguales, seres vivos y espirituales. En las medicinas preparadas con ellas estaba presente el poder del espíritu de las plantas. En este ritual utilizaremos dos.
- Salvia: Propicia la claridad mental, la serenidad y la alegría.
- Laurel: Protección, triunfo, abundancia. El laurel es una planta muy usada en distintos rituales, es proclamado protector del hogar. Existe la costumbre en muchos hogares de colocar un ramo de laurel en la puerta para alejar las malas energías.
- Semillas: las semillas representan la abundancia en la tierra, son lo que nos devuelve la Pacha Mama con sus frutos y flores para que sigamos teniendo alimentos. Recoge semillas, de arboles, frutos y flores, esta búsqueda es parte del ritual, ya lo estarás poniendo en marcha.
Procedimiento
Colocar en una ollita un vaso de agua, más siete hojas de laurel y siete hojas de salvia. Llevar a ebullición y apagar, dejar reposar durante toda la noche fuera de la casa. Colar y poner el preparado en un atomizador. Si quieres puedes agregar algunas gotas de esencia de tu agrado, pero no es necesario. Seguramente te sobrará de este preparado después de usarlo para el ritual; puedes utilizarlo para hacer limpias de lugares u objetos o rociarte tu misma.
Ahora a intencionar la vela. Comienza este ritual unos días antes de fin de año. Rocía la vela con el preparado, una vez por cada deseo o pedido. Puedes hacerlo en varias etapas.
La noche del 31 de diciembre coloca la o las velas intencionadas en un recipiente adornado con las semillas y enciéndelas. La luz de la vela, el perfume de las plantas y el poder abundante de las semillas acompañarán las últimas horas del año viejo y recibirán el nuevo, con todas las buenas intenciones y energías que pusiste. Observa y siente como te envuelve y se expande la armoniosa y maravillosa luz de tus deseos.
¡Buen ritual y que todo se manifieste!