En el posteo anterior hablamos sobre los orígenes del Movimiento de la Diosa (movimiento político, social y cultural) que tuvo lugar en distintas partes del mundo junto con la segunda ola feminista y del que nace, para algunos autores, la Tradición de la Diosa (movimiento de espiritualidad femenina) Este movimiento promueve la libertad y la igualdad de derechos y en él no hay jerarquías ni estructuras. Hombres y mujeres en igualdad de condiciones.
A partir de este movimiento sus seguidores aportaron una gran variedad de publicaciones que nos acercan a esta creencia, proponiendo creer en una Diosa Universal creadora de todo y en sus arquetipos que son las distintas formas en las que ella se manifiesta. La Diosa está nosotras y se manifiesta a lo largo de nuestras vidas. Conectando con ella podrás hallar tu divinidad y el profundo amor por la tierra y sus reinos, conformando una relación sagrada. La Diosa es la matriz sagrada en la que todo se gesta y la Luna es el eje de los arcanos femeninos, ella es la primera representación de la mujer.
Ahora te presentaremos algunas de las formas en las que la Diosa manifiesta.
Pachamama.
Diosa de las tierras de la América andina. Representa la totalidad del universo, los tres mundos, el de arriba, el medio y el de abajo. Todo está en ella y todo nace de ella, animales, plantas, rocas, el reino animal, vegetal y mineral se contienen en ella. Las aguas de los ríos, mares y océanos también son la Pacha.
El 1 de agosto se festeja el día de la Pacha en esas zonas, realizándose diferentes rituales en las comunidades, uno de ellos es pedir permiso a la Madre Tierra, la Pacha para cavar un hoyo en ella, allí se depositan agua, semillas, hojas y otros alimentos como comidas típicas del lugar, agradeciendo por ellos
El hoyo abierto en la Tierra representa su boca, corazón y vientre y es allí donde se produce la magia, el milagro de la fertilidad, la vida.
Este ritual es un acto de amor y agradecimiento.
La Pachamama nos invita a conectarnos con la sanación y la transformación femenina; a recorrernos por dentro y por fuera para encontrar la fecundidad, la creación, el poder del amor y las energías de las que somos parte. Somos Pacha.
Diosa Hilandera
La Hilandera, es una divinidad de la cultura de los pueblos nativos americanos del norte. Es la tejedora, la mujer araña; la encargada de unir con su tejido los dos mundos, el de arriba desde donde teje y el de abajo el que habitamos.
Las creencias y leyendas varían según las comunidades que adoraban a la divinidad, se la ilustra con cuerpo de araña y rostro de mujer o como una mujer tejiendo una tela de araña. Se le adjudica ser la creadora de la vida humana y de todo lo que existe en la tierra, también la de ser tejedora del destino, todo nace, crece y se corta. La luna y los cuatro rumbos o puntos cardinales también son parte de su creación.
La Hilandera es un arquetipo profundamente femenino de gestación, creación y recreación.
La conexión con La Hilandera nos provoca revisar nuestro proceder con los hilos de nuestra propia existencia. Nos indica que somos los creadores de nuestro destino, así como pensamos atraemos a nuestra red.
La Hilandera nos conecta con la gestación, la creatividad, la sanación y a través de él hilado como ritual chamánico, a conectar con nuestra memoria inconsciente.