¿Has escuchado hablar sobre los abrazadores de árboles? Aquí te contaremos un poco sobre este movimiento, que generó una herramienta que años más tarde se convertiría en una forma de proteger la naturaleza.
Los Bishnois.
Los Bishnois eran una secta religiosa del nordeste de India que mantenían una directa y equilibrada relación de respeto, compasión y cuidado por la naturaleza. Eran vegetarianos y dentro de sus preceptos contemplan la ética ecológica de proteger y no hacer daño a ningún ser vivo, estos son algunos de los compromisos que asumen.
Cuenta la historia que en el año 1730 el Maharajá (Rey) envió a cortar cientos de árboles para refaccionar su palacio a la aldea de Khejarli, a esta acción se interpuso una mujer Amrita Devi, que fue seguida por más de 360 habitantes de la aldea, quienes se ataron y abrazaron a los árboles para impedir la tala. Lamentablemente esta acción es recordada como la Masacre o El gran sacrificio de Khejarli, donde todos murieron defendiendo a la naturaleza. Este movimiento formado mayormente por mujeres es reconocido mundialmente como fundante del ecologismo actual.
Movimiento Chipko
Años más tarde en 1973 encontramos registros en la India de un Movimiento con las mismas características de los Bishnois, el Movimiento Chipko (abrazar, aferrarse) estos preocupados por la deforestación desenfrenada se internaron en el bosque e impidieron la tala de trescientos árboles, en este movimiento también mayoría de los integrantes eran mujeres (eco feminismo).
Estas acciones se extendieron por otras aldeas contribuyendo a formar una conciencia ecológica en defensa de la naturaleza del Himalaya, en 1980 Indira Gandhi firmó un decreto de prohibición de tala por quince años en esta zona.
El movimiento Chipko, contribuyo a una mejor articulación comunitaria, solidaridad y ayuda, en definitiva a tener una conciencia ecologista más global.
La espiritualidad de este movimiento fue una clave importante en su desarrollo “El principio femenino de la naturaleza donde ella es la vida” Y la creencia de que los árboles, los ríos, las montañas y todos los seres vivos eran sagrados.
El Movimiento Chipko trascendió sus fronteras e inspiró a muchas personas a tomar un papel activo en la protección y cuidado del medio ambiente y en el uso sostenible de sus recursos.
Lamentablemente la tala indiscriminada de árboles, el monocultivo en las tierras, la cría de animales y pastoreo en gran escala aun existe y crece de manera exorbitante; pero existen muchísimas organizaciones y movimientos sociales que se dedican a defender la naturaleza toda, la biodiversidad y el derecho a tener un medio ambiente sano y equitativo para todos.
Es de suma importancia tomar conciencia del estado de nuestro planeta, nuestro hogar y contribuir en su cuidado ! Hasta la próxima nota!