Los 9 niveles hacia la calma mental

En este artículo presentamos la charla brindada por René Feusi, que con una indescriptible simplicidad nos comenta sobre los pasos que iremos recorriendo en la búsqueda de la calma mental a través de la práctica de la meditación.

Cuando estás viviendo tus primeras experiencias con el estado meditativo, es muy probable que te encuentres luchando con el pensamiento: “No puedo hacerlo” “Esto es para otra clase de personas, no para mi”.

Suena lógico que lo pienses así, porque cuando al fin logras hacerte el tiempo para meditar, para conocer la maravilla de la que tanto hablan los iluminados, tener ese espacio mágico para conectarte con tu verdadero ser… lo único que ocurre es que estás pensando en lo que vas a cocinar a la noche, las actividades del trabajo del día siguiente, lo incomoda que es la silla en la que estás sentado, etc, etc.
“Pero… ¡esto no tiene nada de mágico! Para eso me quedo sentado mirando televisión, no tiene sentido que siga insistiendo.” Es la inevitable conclusión.

Para peores, cuando buscas información al respecto, quieres conocer la opinión de los demás y cómo son sus experiencias, empiezas a compararte (una actitud muy propia de la mente). “Ellos pueden, yo no” “Seguro están mintiendo” o “A la mayoría le cuesta demasiado, yo no podré”. El parloteo de la mente puede variar pero el resultado de fondo es el mismo: Te pones ansioso, le das cada vez menos importancia, lo dejas…

Si tomas la meditación como algo divertido, la mente no podrá destruir tu meditación. Si no lo haces, la transformará en otro viaje del yo y te tornará muy serio. Comenzarás a pensar: “Soy un gran meditador. Soy más sagrado que el resto de la gente, mientras que todo el mundo es terrenal, soy religioso, soy virtuoso.” Es esto lo que les ha sucedido a miles de así llamados santos, moralistas, puritanos: solamente están jugando juegos del yo, sutiles juegos del yo.

Osho

Me parece vital que escuches cada palabra del maestro Feusi. Él te está diciendo que NO lo estás haciendo mal, simplemente estás en el primer nivel, un nivel por el que necesariamente todos deben pasar.

Menciona claramente que estarás un segundo en el objeto de meditación (respiración, recorrido interno, etc) y te irás. Puede resultar exasperante la situación, pero hay que aceptarla, es un paso, estás haciendo lo mejor que puedes en éste momento, y estás sin dudas ejercitando y fortaleciendo tu capacidad de centrar tu atención.

No te preocupes por el fruto de tus acciones: mantente atento a la acción misma. El fruto ya vendrá cuando corresponda.

Eckhart Tolle.

El tipo de meditación que práctico con más frecuencia es “Mindfulness”. Uno de sus componentes principales es la Actitud, que se traduce en la forma en la que vemos nuestro estado actual:gentilmente, con plena aceptación y presencia en el momento.

Entonces cuando estés sentado meditando y empieces a sentirte ansioso, te puedes decir: “Si, estoy ansioso, lo acepto, lo vivo”. Siente tu cuerpo y sus mensajes, la tensión muscular, tu flujo de energía interno.
Recuerda, estas en el camino de la calma mental, en el primer nivel, disfruta el viaje y sigue avanzando.

Un viaje de mil millas comienza con el primer paso.

Lao Tsé