Es muy común en la actualidad, el uso de sahumerios de varillas, en polvo, o los de barra, llamados tibetanos; muchos acudimos y disfrutamos de esos humitos y aromas que nos transportan mental y emocionalmente a estados de bienestar. En la nota de hoy nos sumergimos en ese asombroso y mágico mundo que es parte de la Aromaterapia.
¿Qué son los inciensos?
Los inciensos son materiales aromáticos que se queman para liberar un humo fragante, utilizados tradicionalmente en rituales religiosos, terapéuticos y meditativos. La palabra “incienso” proviene del latín “incendere”, que significa “quemar”. Los materiales que se quemaban originalmente sobre carbones o planchas de metal caliente para producir el humo fragante, eran las resinas naturales y las mezclas de hierbas secas.
Origen e Historia.
La existencia del incienso se remonta a la antigüedad, con evidencia de su uso en el antiguo Egipto, donde se quemaban para agradar a los dioses, limpiar ambientes, embalsamar a los muertos y como repelente de insectos. También fue ampliamente utilizado en otras grandes civilizaciones antiguas como la China, la India y Mesopotamia. En China, el incienso se utilizaba para ceremonias religiosas y era un elemento esencial en las ofrendas a los ancestros y deidades. En la India, se convirtió en una parte integral de la vida espiritual y religiosa, especialmente dentro del hinduismo y el budismo, donde el incienso simboliza la purificación. También fue y es muy usado en civilizaciones de Mesoamérica como la mexica y la maya donde la resina sagrada era la del árbol de copal.
Evolución y Difusión
A lo largo de los siglos, el incienso se difundió desde el Oriente hacia Europa a través de las rutas comerciales, como la famosa Ruta de la Seda. Durante la Edad Media, el incienso era extremadamente valioso en Europa y se usaba en ceremonias eclesiásticas cristianas para simbolizar la oración ascendente y la presencia de lo divino. En el mundo islámico, el incienso también se usaba en contextos religiosos y sociales, marcando eventos importantes y como señal de hospitalidad.
Tipos de Incienso.
Existen varios tipos de incienso, que varían según su forma y los ingredientes utilizados.
- Incienso en varillas: es el más común en la actualidad, consiste en varillas de madera recubiertas de una mezcla de aceites esenciales, resinas y otros aromatizantes.
- Incienso en conos: pequeños conos que se queman para liberar humo.
- Incienso en grano o resina: que se quema directamente sobre carbones o en un quemador especial (sahumador).
- Incienso en polvo: se quema sobre carbones en sahumadores.
Uso Actual
Hoy en día, el incienso se usa no solo en prácticas religiosas y espirituales, sino también por sus propiedades aroma terapéuticas y para mejorar el ambiente en el hogar. Es común en prácticas de meditación y yoga para crear un ambiente tranquilo y concentrado. Además, en la Aromaterapia, se utiliza para influir en el estado de ánimo, aliviar el estrés y para ayudar a mejorar la calidad del sueño.
En resumen, el incienso tiene una rica historia y sigue siendo utilizado en muchas culturas y prácticas modernas por sus efectos beneficiosos y su capacidad para elevar el espíritu y purificar el entorno.
Aromas populares de inciensos y sus significados.
Sándalo: Uno de los aromas más comunes, el sándalo es conocido por su capacidad para calmar la mente y ayudar en la meditación. Se cree que promueve la claridad, la serenidad y la purificación.
Lavanda: Este aroma es famoso por sus propiedades relajantes. Se utiliza para aliviar el estrés, promover la paz interior y ayudar en el sueño. La lavanda también se asocia con la purificación y la protección.
Mirra: Tradicionalmente utilizada en prácticas religiosas y rituales de purificación, la mirra se considera un incienso que promueve la inspiración y la sanación. También se utiliza para fortalecer el espíritu y mejorar la conexión emocional.
Incienso (Frankincense): Conocido por su uso en ceremonias religiosas, el incienso es valorado por su efecto elevador que se cree estimula la conexión espiritual y la introspección. También se dice que tiene propiedades que ayudan a aliviar la ansiedad y el estrés.
Pachulí: Este aroma terroso es a menudo utilizado para atraer el amor y la abundancia. Además, se cree que el pachulí tiene un efecto equilibrante y calmante, y se utiliza para fomentar la relajación y la conexión con la tierra.
Canela: Este cálido aroma es a menudo usado para estimular la energía y la actividad. La canela también se asocia con la atracción de la prosperidad y la mejora del enfoque y la creatividad.
Jazmín: El aroma de jazmín se utiliza para fomentar el romance y la pasión, así como para promover la relajación y el bienestar emocional. También se cree que ayuda en la meditación y la claridad mental.
Cedro: Usado para la purificación y como protector contra la negatividad, el cedro también se utiliza para fomentar la fuerza y la confianza.
Estos son solo algunos ejemplos de los muchos aromas de incienso disponibles, cada uno con su propio conjunto único de significados y usos en diversas culturas y prácticas.
Esperamos que esta nota haya sido de tu interés y te animamos a seguir explorando en este mágico mundo de aromas y humo. ¡Hasta la próxima!
La Pacha Espiritual.